Empieza nuevo dia y toca desplazarse. A las 8:30 ya estamos fuera del guesthouse en busca de un tuk tuk que nos lleve a la estación de buses. Ahí, compramos los tickets hacia Pai y desayunamos unos clasicos bikinis.

En el minivan, vamos llenos, tanto de personas como de maletas. Nuestras mochilas estan en el techo. Son tres horas de viaje con 700 curvas, osea, un viaje entretenido.

A nuestra llegada en Pai, vemos que las calles estan repletas de mochileros, las calles, tiendas y lugares para los turistas que llegamos aquí, estan preparadisimas.

Caminamos un kilometro hasta nuestro nuevo guesthouse. Se llama flower garden. Tenemos una casita para nosotras y todo un jardin con gallos, gallinas i pollitos.

Salimos hacia el centro para comer y acabamos comiendo pasta (por fin!) Y un batido con helado.

Alquilamos una motillo por 150 bat y subimos a ver el templo más importante, con un buda gigante blanco, acompañado de 350 escaleras.

Luego, seguimos nuestro recorrido por una carreterita solitaria pero con unos paisajes preciosos, hacia unas aguas termales naturales (que calor hacia, y el agua estaba hirbiendo!). También, durante el recorrido hacia la fuente de agua termal, empezamos a quedarnos sin gasolina pero econtramos una especie de tienda, donde nos sirven un embudo con una jarra llena de gasolina para poder reponerla!

Seguidamente vemos el puente que construyeron los japonesed en 1942 y vamos en busca del gran cañon. (Aunque eso de Gran se le queda un poco grande, jejeje)

Volvemos hacia Pai a eso de las 18:30, parece que empieza a llover pero son 4 gotas que casi no mojan ni el suelo. Aparte, volvemos a la estación de buses a buscar mi guia de Tailandia que me habia dejado por la mañana dentro.

Volvemos al guesthouse a ducharnos y descansar 30 minutos. Luego, cogemos la moto de nuevo para ir a ver y cenar en el night Market. Este, no es demasiado grande aunque tiene una paraditas con una comida… exquisita! Mañana repetimos seguro!