8.30 de la mañana. Desayunamos, recogemos las cosas y estamos listos para el viaje de 4 horas hacia Baracoa.

Vamos en un compartido, lo que vendría a ser un camión adaptado con asientos de autobús metidos dentro de una lata de sardinas.

Sabíamos que el viaje iba a ser duro así que entramos optimistas. El cacharro, va lleno de gente y, aún ser primera hora de la mañana, hace calor. Las ventanas están abiertas así que el aire corre, aunque brilla por su ausencia en determinados momentos.

El trayecto va seguido de un traqueteo constante y rompe-culos, seguido de un sinfín de curvas y subidas y bajadas. Hacemos varias paradas pues hay vendedores que intentan vender piña, mangos, cucuruchos a los viajeros que vamos dentro…

Cuando finalmente llegamos, un cartel que pone nuestro nombre nos espera. Vamos a una casa particular donde nos atienden muy bien y nos orientan a cerca de lo que podemos hacer por la zona. Dormimos por 15 CUC y 3 CUC de desayuno. Sr Oña. «/moncada 18 C entre Martí y República. Telf. +53 21641910

Salimos a pasear y lo primero que encontramos es la plaza Cristóbal Colón que da inicio al Malecón del pueblo. Claro, me olvidaba, Baracoa es el pueblo al que llegó Colón y en 1511 se estableció como pueblo.

Caminamos por el malecón hasta el primer restaurante que nos parece interesante para comer algo. Vistas al mar. Unos boniatos fritos que simulan patatas fritas y un buen plato de pasta con tomate, jamón y queso.

Al salir seguimos el camino hacia el centro donde encontramos la plaza del wifi y aprovechamos para connectarnos un poco y emprender el camino hasta el final del pueblo.

Vemos la casa del chocolate y no podemos hacer otra cosa que pararnos ha tomar una taza de chocolate frío. Por lo visto hay mucha plantación de cacao en esta zona y es típico pues también hay la fabrica de chocolate por la zona.

Al salir nos ofrecen una clase de iniciación a la salsa por 5 CUC la hora/persona, así que aceptamos para ir más tarde y apalabrados una excursión y el transporte de vuelta a Santiago para mañana.

Vamos a ETECSA pars comprar una targeta con la que llamar por teléfono al taxista de Santiago. Después de todo el procedimiento que hay que hacer con la targetita en las cabinas, no nos deja marcar…. Pues solo es para llamadas a fijos y no se puede a móviles. Nuestro gozo en un pozo. Regalamos la targeta a la señora de la casa y le pedimos que nos deje llamar para concretar el transporte hasta Varadero.

A las 19.00 estamos listos para empezar la clase de salsa. Como si estuviéramos en el cole, 1 profe y dos ayudantes y nosotros tres aprendiendo los pasos básicos, poco a poco, con y sin música. Después de esta clase ya nos creemos bailarines profesionales!! 😊

Al salir vamos a cenar algo y de vuelta a la casa a descansar. Mañana tenemos una excursión y un largo viaje.