Hoy nos hemos levantado a las 7 pues el desayuno se servía a las 7.30. Después de recargar pilas hemos montado en las bicicletas dispuestas a seguir las flechas hasta Somo.

La mayor parte del recorrido transcurre por una pista asfaltada, cruzando alguna carretera secundaria hasta llegar a la zona de playas, con unas vistas espectaculares. Por ese camino, el cambio de mi bicicleta ha sufrido un desajuste y no podía cambiar de plato, aparte los piñones saltaban solos. Necesitábamos ir a un mecánico. Hemos llegado a Somo y hemos cogido un barquito que nos ha acercado a Santander y, ahí, hemos seguido las flechas hasta desviarnos al Decathlon, donde tras casi 30 minutos de ajuste, me han devuelto la bicicleta.

Hemos seguido el camino por un constante sube y baja. El camino transcurre por sendas y carreteras, evitando siempre la nacional, eso nos hace dar algún que otro rodeo y pedalear por unas cuestas, que en ocasiones, nos arrepentimos de no haber cogido la nacional.

Llegamos a Santillana del Mar a las 13.00 h. Hoy, al salir más tarde y al parar en el Decathlon vamos más tarde de lo común. Aparte, el constante sube y baja es matador y nuestras piernas empiezan a notarlo.

En una bajada, un bicho se ha chocado contra mi ojo, casi me quedo ciega, pero ya estoy bien, jejeje 藍

A 7km de San Vicente de la Barquera, un buen hombre nos has dicho que siguiéramos por la zona de playas, que era muy bonito. Así que le hemos hecho caso (en qué momento….). Las vistas muy bonitas, ahora las subidas y bajadas aún eran mejor. Un rompe piernas de verdad.

Eran las 14.30 cuando llegábamos a San Vicente, sin piernas casi y con un hambre descomunal. Hemos parado en un restaurante donde, por 13 euros hemos comido un menú bastante bueno. Luego nos hemos acercado a la pensión, nos hemos duchado, descansado y, por la tarde, hemos subido hasta la iglesia y pasear un poquito.

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Visita obligada al super del pueblo para comprar la cena (tortilla de patatas y pan) y el desayuno y pronto a dormir. Mañana ya llegamos a Asturias.