A continuación se presenta una propuesta de ruta por Croacia de 10 días, 5 de ellos en coche y los demás utilizando el transporte público.
El primer mapa muestra las paradas que hicimos des del aeropuerto de Dubrovnik hasta llegar al norte de Croacia y el segundo los sitios que fuimos visitando hasta volver a Dubrovnik.
Hay que decir de ante mano que este es un viaje para disfrutar de cada pueblo y rincones del país, nosotros quizá quisimos ver muchas cosas en pocos días y hay sitios que no lo disfrutamos tanto como nos hubiese gustado, pero vale mucho la pena!
DÍA 1. BOSNIA Y HERZEGOVINA (Blagaj y Mostar)
Son las 3:00 de la mañana cuando Dani hace la primera parada para pasar a buscarme e ir a por Raül y Carmen. Aprovechamos ese momento, para meter algunos zapatos y neceseres en la maleta de facturación.
Al llegar al Parking de larga distancia (donde dejaremos el coche los 10 días) esperamos a que una furgoneta nos lleve a nuestra Terminal. En teoría el horario no empieza hasta más tarde pero una chica que llega antes que nosotros contacta con el servicio y finalmente nos vienen a buscar, menos mal!
Al llegar a pequeño aeropuerto de Dubrovnik, más de 2h después y con un calor abrasador a las 9:30h, buscamos la oficina de SIXT para recoger el coche que habíamos alquilado. Acabamos de concretar todos los datos y nos entregan un Seat Leon FR, casi nuevo, con pocos km.
Dani toma el mando y nos dirigimos a nuestro 2n destino, el primero era Ston pero se nos ha hecho tarde así que decidimos saltárnoslo e ir directos a Bosnia y Herzegovina. Pasan pocos minutos cuando nos encontramos con la caravana de coches que quieren cruzar la frontera. En las 2 fronteras nos piden el pasaporte pero sólo nos lo sellan en Bosnia (no es un estado miembro de la UE) y nos preguntan a dónde nos dirigimos.
El paisaje es seco pero agradable, los coches son muy antiguos (de los que ya no se ven por Barcelona), hay carreteras con curvas y en muchas de ellas hay paradas donde la gente local vende fruta, verdura, miel (med) algo típico allí, pensamos en parar en alguna pero al final lo dejamos pasar.
Finalmente llegamos a la primera parada, Blagaj para visitar la zona más famosa y turística llamada Tekija. En el parking nos dejan pagar con Kunas croatas, euros o con la moneda de allí (el marco).
El calor en este momento era casi insoportable, aun así nos hacemos unas fotos y decidimos comer en uno de los restaurantes con más encanto (Kulin), al lado del río. Pensábamos que iba a ser caro pero salió a 30€ los 4, así que genial!
Después fuimos a Mostar, está a solo 20 minutos y es famoso por el puente situado en el casco antiguo desde donde se hacen algunas competiciones de saltos famosas.
Es una excursión que suele promocionarse mucho desde Dubrovnik.
Paseando por las calles se pueden ver algunas mezquitas (te cobran por entrar), algunos edificios que quedaron marcados por las guerras, bombardeos e incluso abandonados pero también se aprecian otros más modernos, junto con el casco antiguo forman una variedad arquitectónica que le hace ser una parada obligatoria.
Mientras caminamos el calor seguía apretando hasta que de repente empezó a nublarse el cielo y en cuestión de pocos minutos empezó a llover y todas las paraditas de souvenirs, etc se ven obligados a recoger. Eso hizo que nos replanteáramos seguir con la ruta.
De camino a Croacia pudimos apreciar bonitos paisajes montañosos, verdes y algunas zonas quemadas. Como dato irrelevante se puede decir que hay algunas palabras bosnias que suenan un poco graciosos si las comparamos con el español como por ejemplo, una marca de detergente o suavizante de ropa que se llama “teta violeta” o peaje “putarina”…
Al cruzar la frontera croata nos dirigimos a Makarska donde pasamos la noche. Lo primero que hacemos al llegar es ducharnos, cenar, recorriendo las bonitas calles y volvemos al hotel, estamos agotados del madrugón, el coche…
Alojamiento (Makarska): Guesthouse Komfor Moča
DÍA 2. MAKARSKA, SIBENIK, PARQUE NACIONAL KRKA, ZADAR
Hoy queríamos hacer muchas cosas así que bajamos a desayunar a las 7.30h y antes de coger el coche damos una vuelta para conocer Makarska, es un pueblo bonito del que se disfruta las vistas a la montaña y al mar y del que todavía conserva algo del estilo veneciano.
Des del puerto se tienen unas vistas muy bonitas del pueblo y además allí mismo hay una playa en la que ya hay mucha gente de buena mañana, hubiese estado bien darse un baño pero hemos tenido que sacrificarlo para poder hacer todo lo previsto. El sol un día más es potente y parece que será durante todo el viaje!
La siguiente parada es Sibenik, otro pueblo bonito y con una famosa catedral (Catedral de Santiago) que forma parte del Patrimonio Mundial de la Humanidad de la Unesco. En ella se puede apreciar algunos daños sufridos en la guerra con los serbios en 1990 (20kn).
Después de comernos un helado retomamos camino hasta llegar a uno de los parques nacionales más conocidos de Croacia el Krka. A diferencia de Plitvice en este hay una zona de baño. Con la entrada tienes acceso a un bus que te deja en la entrada al parque, el recorrido es solo 1km en bajada con curvas, unos 20’ caminando pero hacía mucha calor, y nos decantamos por el bus que tiene una frecuencia de unos 20’ (en ese momento no lo sabíamos, nos tuvieron esperando dentro del bus todo ese rato). El tema de los buses está muy mal montado tanto a la ida como a la vuelta, la gente se intenta colar, los que controlan no hacen caso a nada, puede resultar un poco caótico.
La entrada al Parque son 200kn (27€ aprox) pero es muy bonito, tiene cascadas grandes y paisaje verde pero la zona de baño está extremadamente MASIFICADA, hay muchísima gente, pero apetece bañarse y al final te las apañas para encontrar hueco.
Recomendable: llevar la comida (el super más famoso es el Konzum y también hay algún Lidl) e imprescindible zapatillas tipo cangrejeras para evitar resbalones…
Conducimos 1h más hasta llegar a Zadar esperando ver el atardecer (sobre las 20h) y aunque una vez más pasamos del calor a la lluvia/diluvio lo pudimos contemplarlo al llegar.
Al volver al hotel para cenar en el buffet, nos dimos cuenta que el comedor estaba lleno de españoles, cuando digo lleno es que sólo habían mesas de españoles que debían tener un viaje preparado, eran de diferentes edades y lugares. Luego dimos un paseo por el pueblo (muy turístico pero bonito) y nos acercamos a escuchar el órgano de mar. No fue un momento tan relajante como esperábamos porque justo al lado estaban haciendo un concierto pero se apreciaba el sonido, era curioso.
Alojamiento (Zadar): Hotel Porto (está a las afueras)
DÍA 3. POREC, ROVINJ, PULA
Hoy una vez más nos levantamos temprano para hacer el trayecto más largo (4h) hasta llegar a Porec, no sin antes ponernos las botas en el buffet del hotel acompañados de nuestros paisanos.
Durante el viaje hemos pagado muchos peajes pero hoy ha sido el más caro, casi 19€.
Estamos en el norte, en el condado de Istría, muy cerca de Italia por lo que aquí el italiano es como el segundo idioma. En Porec visitamos la Basílica (40kn) que contiene algunos mosaicos muy bien conservados y paseamos por todas las calles.
Estamos hambrientos y sin darnos cuentas nos sentamos en un restaurante vegetariano, aunque ninguno de nosotros lo somos, es fácil encontrar este tipo de restaurantes por toda Croacia.
Después de Porec llegamos al pueblo pesquero de Rovinj, un pueblo que me enamoró, por sus calles, el puerto, las playas…
Como muchos de estos pueblos cercanos a Italia este también tiene recuerdos venecianos como la Basílica de Santa Eufemia.
Y para finalizar el día llegamos a Pula, sin saberlo nos alojamos justo al lado del anfiteatro, situación inmejorable. Es muy bonito verlo de día pero también de noche con la iluminación. Nosotros no entramos porque hacían un musical pero sabemos que hay venta de tickets.
Otros de los monumentos importantes que se pueden visitar y de los que no tenemos fotos son: el Templo de Augusto y el Arco de Triunfo (Arco de Sergio), a parte de las “puertas gemelas” donde se encuentran túneles subterráneos o el “Kastel” es una fortaleza en la montaña.
Después de estar un rato callejeando por las calles buscando un sitio donde cenar y viendo el encanto del pueblo, acabamos en el típico sitio donde acabaría un guiri en La Rambla de Barcelona, pero el pescado estaba relativamente bien y el camarero que nos tocó era muy simpático y sabía un poco de español.
Alojamiento: Hotel Scaletta (justo al lado del anfiteatro)
DÍA 4. PLAYA EN PULA y trayecto en coche hasta la zona del Parque Nacional de Plitvice
Antes de seguir con la ruta bajamos a desayunar. Hasta ahora nos habíamos dado cuenta que el hotel y las habitaciones tenían un estilo muy coqueto pero al ver el pequeño salón para desayunar comprendimos que no habíamos visto nada, las mesas y la variedad en el desayuno estaban preparadas con mucho amor.
Después de hacer alguna que otra foto a uno de los 6 mayores anfiteatros del mundo (otra vez), buscamos una playa cercana donde refrescarnos (30º a las 9:30h) y hacer un poco de snorkel, no es que haya gran variedad de fauna marina pero al ver las aguas cristalinas apetece.
Cuando ya nos hemos dado un baño fresquito y nos concienciamos del tramo que nos queda hasta llegar al Parque nos topamos con una caravana de coches que parece infinita, pasan unos minutos cuando empezamos a sentir un poco de pánico al darnos cuenta que cada ciertos minutos el depósito de gasolina va bajando y con ello los kilómetros de reserva (bajan de 5 en 5) vamos echando a suertes quién caminará hasta la gasolinera que se encuentra a 1km escaso de donde estamos cuando de repente la cola se va agilizando poco a poco y conseguimos llegar.
Un dato curioso, es que en las gasolineras hay gente joven a la que pagan por limpiar la luna del coche mientras repostas, antes de que te des cuenta están poniéndote el líquido, tener cuidado y decirles que no si no queréis.
Por cierto, la caravana se debía al pago de un peaje (no sabemos si siempre se crean esas colas pero ir con gasolina por si acaso jajajaja).
En el trayecto seguimos viendo paisajes montañosos verdes y otros quemados, es una lástima!
En un momento nos paramos en un Lidl y compramos carne para cenar y el desayuno del día siguiente.
Cuando llega la hora de comer, nos paramos en una estación de servicio para comer comida rápida/basura (hamburguesa, frankfurt, bikini…) de mala calidad. No sé si será igual en todas pero descartamos el pararnos en otras.
A medida que nos vamos acercando a la zona del Parque Nacional de Plitvice nos damos cuenta cómo cambia el paisaje, no es ciudad, se ve algún edificio afectado por la guerra, es más verde, rural, con ovejas y vacas campando a sus anchas por el campo, da gusto cambiar de aires.
Al llegar al alojamiento nos llevamos la gran sorpresa del día, no se trata de un apartamento sino de un “sobe”. “Sobe” en croata significa “habitación” y en Croacia está lleno, tiene una infraestructura turística increíble. Siempre habíamos visto miles de carteles pero no pensábamos que acabaríamos en uno de ellos de forma tan directa. Se trata del alquiler de una habitación dentro de la casa de alguien o en un módulo aparte. En nuestro caso era un módulo con 2 o 3 habitaciones que comparten un baño y otra habitación con baño propio.
La anécdota está en que al llegar al parking/jardín de la casa, se nos acerca una mujer que nos pregunta “¿Booking?” y empieza a enseñar las habitaciones y a hablarnos en croata, hablaba sin parar como si nosotros entendiéramos algo! fue raro y divertido a la vez.
Como resultó que no era un apartamento y habíamos comprado carne para la cena, a través del google translator le preguntamos si podíamos cocinar en algún sitio la carne o nos lo podía hacer ella y le pagamos pero no hubo suerte. Ella solo nos decía que fuéramos a un restaurante de por ahí cerca que tenían buena comida y ahí que fuimos después de descartar otras opciones.
Para hacer un poco de hambre dimos un paseo por la zona contemplando el paisaje y fuimos al restaurante (con reserva previa porque estaba petado). La mujer tenía razón todo estaba muy rico. Los chicos se pidieron la “Crepe” tradicional de allí (sladoled) es enorme! El restaurante se llama Bistro Vila Velebita.
Alojamiento: House Pribić (sobe)
DÍA 5. PARQUE NACIONAL DE PLITVICE
Desayunamos temprano en la habitación de Dani y mía donde teníamos toda compra en la nevera y antes de irnos vemos a otros huéspedes que estaban desayunando en el jardín de la casa, no sabemos si porque les han dejado el espacio o les han preparado el desayuno. En nuestra reserva no ponía nada pero si alguna vez cogéis algún alojamiento sobe preguntar estas cosas al llegar, puede ser interesante compartir esos momentos con los propietarios u otros huéspedes.
Tenemos unos 15-20’ hasta llegar a los Lagos de Plitvice, vamos disfrutando del paisaje y observando la cantidad de coches que nos dirigimos allí. Hay varias entradas, nosotros fuimos a la principal la número 1, dejamos el coche en el parking del Parque (49kn todo el dia).
Había un poco de cola para comprar los tickets pero va más o menos rápida, la entrada son 250kn (unos 34€). El parque es enorme, tiene varios circuitos que van desde las 2h hasta las 8h aprox. Nosotros decidimos hacer el recorrido C que es de 4h a 6h (8km).
Todos los circuitos empiezan en el mismo punto, en un mirador donde se puede ver la cascada más grande.
Durante el recorrido por la pasarelas se pueden ver cascadas, cuevas y lagos que invitan al baño, aunque está prohibido.
Al llegar a un punto cogemos un barco que nos lleva a otro lado. Los barcos pasan cada 30’ aproximadamente, se forman largas colas pero vale la pena!
Al llegar al otro lado y después de caminar un poco nos encontramos con un cola interminable y nos dimos cuenta que era solo para hacerse una foto, así que como vemos que hay más gente que “le pone cara” decidimos colarnos y pasar de hacer esa foto, podríamos haber estado horas allí!
Seguimos caminando un poco más observando el paisaje de bosque y nos paramos un poco antes de llegar a la zona de picnic donde nos comemos los bocadillos. Después cogemos el bus que nos deja cerca del parking.
En el camino que cogimos hasta llegar al coche hay unas vistas impresionantes del parque.
Tal y como estaba previsto estuvimos todo el día de visita, entre fotos y alguna cola.
La siguiente parada antes de dejar el coche en Split era Trogir que se encuentra a 15’ pero se nos ha echado el tiempo encima y no tenemos tiempo, una lástima porque hemos escuchado que es muy bonito.
Al llegar a Split las chicas nos quedamos en el apartamento hablando con la propietaria Marija (muy simpática) y los chicos van a devolver el coche a la oficina de Sixt.
Después de una buena ducha y hacer una lavadora, nos dimos una vuelta por Split, como el resto de sitios nos pareció muy bonito el casco antiguo. Es la segunda ciudad más grande de Croacia y tiene mucha historia.
Cenamos por un restaurante de por ahí, hicimos el ritual del helado y volvimos al apartamento, a unos 10’.
Alojamiento: Stone Wall apartments (el apartamento se encuentra en una zona de muchas callejuelas, cerca del centro. Contactar previamente)
DÍA 6. SPLIT
Marija nos trae un desayuno completo a las 7.30h.
Empezamos el día dando un paseo por Split (visita obligada si pasas varios días en Croacia) y visitando algunos lugares como: la Catedral, el Baptisterio/Templo de Júpiter y la cripta (todo es pequeño), hay un ticket que incluye las 3 cosas (28kn) y otro que permite subir a la torre (45kn). A la catedral no se puede entrar en pantalón por encima de la rodilla ni tirantes, se puede alquilar una túnica.
Seguimos paseando por todo el casco antiguo donde hemos podido ver puestos de fruta, galerías de arte subterráneas y edificios como estos:
Un día más se nota la ola de calor y nos acercamos a una playa que parece más bien una piscina además tienes que irte muy lejos para que te cubra. Es muy fea pero nos refresca.
Pasamos ahí un rato y después de una ducha nos vamos a un restaurante que nos había recomendado Marija, Fife.
El restaurante tiene comida típica croata y la carta la tienen también en español, no es de extrañar porque está plagado. De hecho detrás de nosotros había unos murcianos que nos recomendaron algunos platos típicos como el estofado con ñoquis.
Aprovechamos para preguntarles si valía la pena coger un bus para visitar Trogir, nos dijeron que era muy bonito pero muy pequeño que quizá nos podríamos ahorrar el viaje. En su lugar nos recomendaron unas calas muy bonitas de Split pero teníamos que coger taxi y al final acabamos caminando por calas muy chulas y parando en una playa que también valía la pena.
La cena hoy ha tocado en el apartamento pero luego hemos salido a tomar unas copas por la zona del puerto y que decepción. Nos han cobrado 6€ por cada mojito y no tenían gusto a nada…
Alojamiento: Hotel Stone wall (el mismo que ayer)
DÍA 7- ISLA DE HVAR
Hoy Raül y Carmen deben coger un vuelo de regreso a casa (por una buena noticia) por lo que desayunamos temprano, ellos cogen el bus que les llevará al aeropuerto de Split y Dani y yo vamos directos al puerto para comprar los tickets del ferry que nos llevará a la isla de Hvar (90kn), famosa por sus campos de lavanda y porque veranean algunos famosos.
Salimos a las 9:30h y llegamos pasadas las 11h y entonces empezó nuestra aventura.
Al llegar nos dimos cuenta que el hotel estaba en la otra punta de la isla (a unos 30’ en coche en la zona de Jelsa) por lo que teníamos que coger transporte. Teníamos varias opciones:
- Bus: fue nuestra primera opción, aunque no salía hasta las 12h (los horarios de buses y ferris no están bien sincronizados) nos comimos una ensalada y fruta de unas paradetas que habían al lado. Mientras esperamos hablé con la mujer del apartamento y nos dijo que el bus tardaba unas 2h porque hacía muchas paradas, por lo que descartamos esa opción.
- Taxi+moto: queríamos coger un taxi hasta el hotel y luego alquilar una moto para movernos por la isla. Por el taxi nos pedian 500 kunas y regateando 350kn, es caro y además lo tendríamos que pagar para ir y mañana para volver.
- Alquilar coche: hay muchas compañías. La mayoría piden un mínimo de 600kn por el coche más pequeño pero encontramos una por 500kn y aceptamos.
Advertencia del alquiler de coche. La compañía Luca rent agency nos retuvo una fianza 8000kn (+1000€) cosa que nos dio un poco de miedo porque además lo bloquearon al momento. La recogida del coche se hacía a unos 5 minutos de la oficina donde habíamos pagado. Al llegar había un chico que nos señaló un Volkswagen Polo de no sé qué año! y con la publicidad de la compañía y nos dijo que era el único que estaba disponible en ese momento, después de revisarlo y encontrarle algún pequeño fallo nos lo quedamos. Habíamos perdido mucho tiempo y queríamos aprovechar el día.
Fuimos directamente al apartamento donde nos esperaba una mujer (Magda) que nos abrió el acceso a la calle (sólo está permitido para vecinos). A diferencia de otros croatas que nos parecen un poco “secos” y con poco ímpetu por ayudar a los turistas de fuera, esta mujer es encantadora.
La habitación que teníamos reservada para 4 era enorme: una cama grande, con salón, 2 camas individuales plegables y un lavabo que estaba genial.
Una vez dejamos las maletas cogimos el coche e hicimos la primera parada en una cala preciosa con el agua cristalina, estábamos junto con otra familia, tranquilos, se estaba muy bien pero entonces decidimos movernos y ver alguna más.
Antes visitamos la zona de Stari Grad, un pueblo de piedra precioso y con mucho encanto.
Por la carretera se pueden ver como aparcan muchos coches para bajar a las calas, algunas de ellas están muy abajo otras quedan más cerca, nosotros nos paramos en una cercana a la zona de Hvar pueblo también tranquila, con rocas que invitaban a hacer snorkel.
Aprovechando que estábamos por ahí, nos acercamos más al pueblo, y nos dimos un paseo por la plaza principal y las callejuelas, todo muy bonito. Además nos hemos acercado a la oficina de alquiler del coche para decirle que el coche no era el que esperábamos, etc y que por favor mañana nos devolvieran la fianza inmediatamente tal y como hicieron para retenerla. Estábamos un poco asustados por la cantidad de dinero que era. Finalmente la chica nos ha devuelto 100kn por el coche (ósea que el alquiler nos ha costado 400kn) y nos ha asegurado que la fianza nos la devolvería sin problemas.
La fortaleza que se ve de fondo la llaman “fortaleza española” porque fueron españoles los que ayudaron en la construcción sirvió de refugio para los habitantes. Nosotros no entramos pero desde la zona hay vistas muy bonitas de todo Hvar.
Para cenar decidimos hacerlo por nuestra ciudad (Jelsa) para conocer un poco esa zona, aunque estábamos muy cansados dimos un pequeño paseo por el puerto, las calles principales y cenamos en un restaurante (Murvica) al lado del apartamentos y que nos había recomendado Magda. El sitio estaba bien y el servicio fue muy atento!
Al llegar a la habitación caímos rendidos de cansancio.
Alojamiento: B&B Aurora (zona de Jelsa, contactar antes de llegar)
DÍA 8. ISLA DE KORCULA
Magda nos ha dejado desayunar antes del horario marcado porque debíamos devolver el coche a las 8h y coger el ferry a la isla de Korcula a las 8.15h. Ella ha estado muy atenta, teníamos un almuerzo con variedad de cosas y muy completo.
Al llegar a Hvar hemos devuelto al coche y hemos ido directos a la oficina de alquiler, la chica tal y como nos prometió nos ha devuelto la fianza al momento y el coche no nos dio ningún problema.
Una vez en la cola del barco mientras yo esperaba Dani ha ido a comprar unos pasteles a la pastelería más famosa de la Isla (Nonica), estaban buenísimos!!!
En el catamarán como no hay asientos en butaca y nos apetece disfrutar del mar nos quedamos sentados en un banco en la popa del barco.
Al llegar empezamos a hacer unas pocas fotos y buscamos la habitación que se encontraba cerca de todo, fue un poco confuso porque no pone el nombre en la calle pero vino el chico y nos dijo por donde era. Lo malo es que tuvimos que esperar hasta las 14:15h para entrar, pero la habitación y el lavabo eran grandes y muy bonitos, se encargaron de cuidar hasta el mínimo detalle, como dejar música de fondo.
En el tiempo de espera a que estuviera lista la habitación paseamos por esta preciosa isla, para nosotros muy recomendable, tiene unas calles y el casco antiguo de piedra que no dejarías de hacer fotos. Hay infinidad de restaurantes que dan al mar adriático y bancos antes de llegar a las rocas donde los paisajes permiten relajarte con facilidad.
Como monumento turístico está la casa de Marco Polo, según los croatas no nació en Venecia sino allí o por lo menos vivió. Hay varias tiendas con el merchandising oficial que tienen cosas interesantes pero son caras.
Después de comer quisimos darnos un baño en una “playa” al lado de los barcos y seguidamente después de un rato de relax caminamos un poco más hasta llegar a una zona donde parecían calas de casas privadas, un sitio increíble.
El paseo por la tarde se hizo muy agradable, pudimos ver la puesta de sol y restaurantes con música en directo que hacían que el sitio fuera más encantador.
Y la gran sorpresa vino después de la cena, cuando en una de las plazas al lado de la playa hacían bailes de danza española/mejicana.
Alojamiento: B&B Guetto (céntrico)
DÍA 9. DUBROVNIK
El desayuno que venía incluido con la habitación lo hacemos en la cafetería de abajo. Algo correcto!
Para ir al puerto pasamos por la pastelería más famosa de Korcula, al entrar me llevé una decepción porque no tenían de casi nada a esa hora, así que nos conformamos comprando 2 especies de “magdalenas” que tenían buena pinta, hay que decir que estaban buenas!
Aviso! La organización de esta isla para coger los ferris es nefasta. Había un hombre que parecía que marcaba las filas pero al final todo el mundo se cuela descaradamente y nadie dice ni hace nada.
Por cierto, las filas están hechas por maletas. Porque el calor por la mañana ya pica lo suyo!
En el catamarán se nota un poco el aire acondicionado algo que se agradece!
Al llegar a Dubrovnik hay muchos taxistas esperando a llevarte al hotel. Nosotros por no buscar que autobús nos llevaba al casco antiguo donde teníamos el apartamento cogimos uno por 105kn, son unos 20′ aproximadamente porque cogimos tráfico.
El conductor fue muy simpático y nos dejó en la entrada de la muralla ya que todo el casco antiguo es peatonal y no hay accesos a los coches.
Como siempre, como los alojamientos no tienen recepción, antes de llegar al apartamento nos pusimos en contacto con ellos y al llegar había un hombre esperándonos que nos lo enseñó. La entrada olía mal porque daba a la cocina de un restaurante y otra parte que no sabemos que había pero el apartamento era acogedor.
Una vez dejamos las maletas iniciamos el paseo para conocer la ciudad. La primera parada fue asomarnos a una tienda donde tenían una réplica del trono de la serie Juego de Tronos y donde la gente se hacía fotos, pero había truco solo te la podías hacer si comprabas algún producto oficial y aunque Dani y yo somos fans nos pareció todo caro y no quisimos comprar por comprar. La ciudad le saca potencial a la serie, hay incluso tours en los que te llevan a los escenarios de rodaje y te enseñan con fotografías las escenas mientras lo explican. Nosotros no lo vimos necesario porque se reconocen rápido y pasas por todos ellos sin querer.
Hay que reconocer que el casco antiguo de Dubrovnik es muy pequeño pero muy bonito, se puede ver en una escapada de fin de semana y disfrutar de: la Puerta Pile, la calle Stradun, la plaza Luza y el Palacio Sponza, la fuente de Onofrio, el palacio rector, el monasterio franciscano, la muralla y las playas.
Los monumentos más importantes se pagan y hay cosas que son caras. La entrada a la gran muralla del Siglo X+ la fortaleza Lovrijenac cuesta 20€ (es lo único que vimos nosotros), junto con lo que se puede ver sin llegar a pagar la entrada del monasterio franciscano. En la oficina de turismo también se puede comprar la Dubrovnik card que permite visitar varios lugares de forma más barata.
Las vistas desde la muralla son únicas y especiales, puedes ver todos los tejados rojos, el puerto, te permite ver unos restaurantes que quedan como en unos acantilados desde donde la gente se lanza, la isla de Lokrum (a 10 minutos). Ver eso desde la altura es precioso.
Dicho esto, todo es muy bonito pero son 20€ que pican un poco. Además hay un mirador en la montaña que se puede subir en bus o teleférico por mucho menos y también tiene unas vistas increíbles de la ciudad. Tanto una cosa como otra merece la pena verlos para el atardecer.
La cena la hicimos en el apartamento y después salimos a ver el ambiente nocturno. Nos comimos un helado en la heladería más famosa “Peppino’s”, las terrazas estaban llenas de gente, hay muchos sitios donde tomar algo y escuchar música de fondo. Nosotros nos decantamos por unos mojitos que estaban mejor que en Split.
Alojamiento: Apartmani Doklestic (muy bien situado. Contactar antes)
DÍA 10. REGRESO A BARCELONA
Hoy es el día que volvemos a casa, los días han pasado muy rápido disfrutando de todos los rincones que hemos visitado. Croacia es un país precioso.
Nos levantamos sin mucho madrugón, desayunando lo que compramos ayer en el super y damos una vuelta por el casco antiguo. Toca hacer las típicas compras de souvenirs (lo hemos dejado para el último momento).
Aprovechamos también para repetir algunas fotos de las que seguramente tengamos ya 20 copias.
También visitamos la fortaleza Lovrijenac (con la misma entrada de la muralla). Es pequeño y no hay mucho que ver pero es bonito y donde se rodaron muchas escenas de la familia Lanister en la serie.
Después de un rato dando vueltas y aguantando el calor, recogemos las maletas y decidimos coger el bus que nos lleve al aeropuerto.
La estación de bus está a las afueras de la muralla pero no tiene pérdida. El ticket nos costó 40kn/p. Pasaba a los 45′ pero llegó uno y nos dijeron que podíamos aprovechar el mismo ticket así que aprovechamos.
El trayecto fue de unos 30 minutos.
Queríamos llegar con tiempo porque queríamos pasar por la oficina de Sixt a reclamar dinero de más que nos habían cobrado del alquiler del coche. Fueron amables y nos mostraron la factura pero a día de hoy no sabemos todavía qué ha pasado, tenemos que comunicárselo a la oficina de Zagreb (tener cuidado cuando alquiláis coche).
Al llegar al pequeño aeropuerto, comimos unos bocadillos que estaban malos, nos sentamos largo rato a descansar, cambiamos dinero, hicimos el check in, miramos las 3 tiendas que hay, compramos algo para picar en el avión y embarcamos.
El vuelo a pesar de que habían muchos niños, fue tranquilo salvo por una avispa que estuvo un rato molestando a los de detrás nuestro.
Resumen muy breve de recomendaciones:
- Croacia es un destino precioso que vale la pena recorrer en coche con tranquilidad y sin prisas.
- Si vas en agosto coge los alojamientos con tiempo, es temporada alta y te ahorras mucho dinero.
- Recomendamos todos los alojamientos en los que hemos estado, todos ellos son: limpios, cómodos, con buena señal de WIFI, con anfitriones simpáticos, modernos y a excepción de alguno, todos están muy bien situados de los puntos más turísticos e interesantes.
- El agua de las fuentes es potable y esta fría, apetece rellenar las botellas.
- Llevar dinero en efectivo. Los bancos no cobran comisión pero el cambio es malísimo. Además en muchos alojamientos se debe pagar en efectivo, en la moneda local o incluso en euros.
- No olvides las zapatillas cangrejeras para la playa.
El mundo a nuestros pies 