Último día en Yogyakarta. Por suerte Cristina me deja dormir más de lo habitual y el despertador suena a las 6.45. Nos levantamos y dejamos la habitación recogida, toca abandonar la ciudad pero antes tenemos que ir a ver los templos de Prambanan.
Dejamos las mochilas en recepción, casco atado y encendemos motores. A escasos 15 km llegamos al complejo. Como ayer, con la entrada nos dan 2 botellas de agua.
No son ni las 8.30 que ya estamos paseando por esos enormes templos considerados patrimonio de la humanidad por la UNESCO desde 1991.
Como ayer, nos sentimos famosas al ver que los indonesios quieren fotos con nosotras. Intentamos poner la mejor sonrisa posible. Nos preguntamos si apareceremos en los cuadros familiares del comedor de alguna de estas personas… 🤔
Nos hacemos diferentes fotos en los templos. Muchos de ellos han quedado destrazos a causa del terremoto que hubo en 2006 pero estan intentando recolocar todas las piezas tan bien como pueden.
Un enorme grupo de chicas de entre 16/18 años entra al recinto. Son estudiantes de inglés y deben practicar el idioma con los turistas. Lo que no saben es que nuestro nivel de inglés es igual o peor que el suyo. Amablemente les respondemos a todas las preguntas que nos hacen (cual es nuestro nombre, pq estamos en indonesia, que es lo que hemos visto, que es lo que comemos, donde iremos después…) pasamos un largo rato hablando con 4 de ellas (30 minutos sin exagerar) cuando nos despedimos y nos dirigimos a otro complejo llegan más pero ahora intentamos ser más rápidas. Bailamos incluso «la macarena» con un grupo de ellas…
Finalmente les decimos a dos que vengan con nosotras a ver el recinto, pues se nos estaba escapando el tiempo. Así que vamos hablando con ellas acerca de su dia a dia. Se levantan a las 4, comen a las 12 y cenan a las 18. Hacen los rezos 5 veces al día, tienen un mes de vacaciones en junio por el ramadan y les encantaría viajar. También nos recomiendan comida, como una sopa tipica… Lo único que con este calor… Como para tomarse una sopa ahora!
Son casi las 12 cuando nos despedimos de ellas. Acabamos de ver los templos solas y nos volvemos a la moto para ir hacia el centro y encontrar un banco donde poder sacar dinero (estabamos teniendo un poco de problemas con la cantidad que podiamos sacar).
Finalmente comemos arroz y pollo, el menú de cada dia. Igual luego iremos estreñidas, pero nos está costando bastante comer. Para empezar en muy pocos sitios hay carta. Y si la hay es en su idioma. A veces cogemos un plato para probar pero es muy dificil que no lleve picante y que, por lo tanto, debamos pedir una jarra de agua entera 🤣.
Volvemos al hostel a devolver la moto y hacer un poco de tiempo en la recepción mientras esperamos la hora para marchar dirección a la estación de tren.
Hace dos dias compramos los tickets para ir hacia Surabaya (5,15h de trayecto) podíamos coger primera clase (18€) o 3a (9,5€). Obtamos por esta última, sin saber muy bien como sería el tren y esperando lo peor (después de ver como eran los de la India…).
Para nuestra grata sorpresa, el tren es mejor que la renfe de españa. Limpio, aire condicionado, tele, cargadores… Luego hablamos sin saber…
Llegamos 5 horas i 30 minutos más tarde y ahí nos esperaba un chico con un cartel con nuestro nombre pars llevarnos al hostel.
Por primera vez en 4 dias, tenemos agua caliente, estamos super felices.
Hoy no cenamos porqué ya es muy tarde (las 23h) y tenemos que madrugar mucho pars coger el avión que nos llevará mañana a la isla de Borneo.