Eran las 7.30h cuando empezaba a pedalear. A primera hora de la mañana ya hacía calor así que no ha hecho falta el gersey.
He pedaleado junto al río Loira la mayor parte del tiempo, por caminos perfectamente asfaltados o con poca grava que son geniales para rutas cicloviejeras.
Son pocas las personas que madrugan , así que el camino era todo (o casi todo) para mí. A las 9h ya estaba en Blois y, tras cruzar el puente, he cogido el carril bici que me ha llevado por un precioso sendero, justo al otro lado del río, pasando por un majestuoso muro de piedra acompañado de su castillo.

A las 10h he hecho un «break» para tomar el segundo desayuno (pan y platano) y he seguido mi aventura tras ponerme una cantidad abundante de crema solar. El sol ya empieza a notarse y hoy, de nuevo, tengo el viento en contra.
Durante 15 km aproximadamente, voy por un camino un poco alejado del río, aburrido y monótono y con el viento en contra aún aburría y cansaba más.
A escasos 15 km de Orleans, me he encontrado con el chico de hace dos días (el francés) con quien he pedaleado hasta la ciudad, hemos entrado al super a por provisiones y hemos acabado comiendo juntos en un merendero.
Mi etapa concluia aqui, tras 97 km, pero como estaba bien y la compañía era grata, he seguido 13 km más (debían de haber sido 10, pero nos hemos equivocado siguiendo un canal que no era, jajaja…)
Tras llegar al càmping, nos hemos despedido. El ha seguido (pues duerme en la intemperie y se para cuando ya está cansado). Quizá mañana nos encontremos de nuevo, ya que yo «madrugo» y el no.
En el camping he aprovechado para lavar la ropa, ducharme e ir a comprar leche ya que hay nevera y me apetecen cereales con leche.
Después de hacer todas las tareas ha llegado la hora de cenar y pronto a dormir, que mañana toca seguir pedaleando!!