Etapa 1.- Irun- Deva 86 km
Són las 21.30 de la noche. Llego a la estación de autobuses de Sants. Tengo que preparar la bicicleta para poder meterla en el autobús. Así que saco la rueda delantera y la embalo con film transparente (ese del supermercado), con un paquete hay más que suficiente.
a las 22.30 sale el autobús con retraso. Va llenísimo de gente. Se nota que empieza la semana Santa. La noche se hace larga, mucho ruido y una parada en medio del viaje que hace desvelar a todo el bus.
Finalmente, a las 6.30 de la mañana llego a Irun. Me pongo al lado del autobús a montar la bicicleta. Casi no hay luz, así que me las apaño como puedo. Antes de las 7.00 de la mañana ya lo tengo todo listo, bicicleta equipada y yo vestida para la aventura. Salgo de la estación de bus en busca de las flechas.
Mi aventura en solitario me la tomo con filosofia, haciendo fotos e intentando ir lo más cerca del camino posible (siempre que sea ciclable). Una larga bajada me lleva hasta Pasajes, donde cojo una pequeña barquita que me acerca a la otra orilla, y sigo pedaleando, un trozo por carretera hasta llegar a San Sebastian.Rodeo toda la playa de la concha y paro ha hacer el primer desayuno del día, sentada al lado del mar. Mi bocadillo aún aguanta, el sol empieza a picar así que crema en mano, agua y gafas. Debemos seguir pedaleando.
Dicen que la subida que viene ahora, la que va cerca del parque de atracciones es dura, así que voy poquito a poquito, sin prisa. Sigo las flechas que me llevan a unas pequeñas carreteritas secundarias de casitas monisimas. Hay muchos peregrinos o nosé si son domingueros que hacen pequeños tramos del camino. Es todo precioso y la pista totalmente ciclabe y asfaltada. veo al mar a mi derecha. Me encanta.


El Sol pica de verdad, así que cuando me encuentro con ellos me pongo protector solar y me cambio el culot largo por el corto. Tomamos unas croquetas, un refresco y enseguida emprendo el camino de nuevo, todo por la costa, atravesando Zumaia (precioso, por cierto).
En Zumaia dejo de lado el mar y me adentro un poco con el sol quemandome la cabeza. Me toca asumir el puerto de Itziar y no se si era el calor, el cansancio, el haber dormido poco o qué, pero se me hizo durisimo.
Por fin, llego a itziar y bajo carretera, encontrandome con el Mar.