Camino Portugués Central

Hacía dos años que habíamos realizado el camino portugués por la costa en bicicleta. Después de tantos caminos, queríamos volver a pisar tierras portuguesas así que cuadramos los días y las etapas para que, en Semana Santa, pudieramos disfrutar de nuevo de sus sendas.

Teníamos 9 días para cruzar todo Portugal y parte de Galicia. Sabíamos que el tiempo no iba a ser el mejor pero íbamos preparadas. Nos esperaban cerca de 650 km, con desniveles importantes y con un peso que no nos dejaba indiferentes. El viento, la lluvia y los adoquines forman parte de nuestra aventura.

Captura

 

Etapa 1.- Lisboa- Santarem 70 km

Comienza una nueva aventura en bicicleta.

Nos levantamos muy temprano, son las 4:15 cuando suena el despertador. Nos vestimos y salimos dirección Sants Estació para coger el tren que nos llevará hasta el aeropuerto. Ahi, cogemos el metro para que nos lleve a la terminal 1 y hacemos las colas correspondientes hasta estar en nuestro sitio dentro del avión. Ahora intentamos dormir…

Pasan escasas 2 horas y llegamos. Aqui, en Portugal, es una hora menos que en España, así que son las 8 de la mañana. Cogemos de nuevo otro metro que nos lleva cerca del centro, desayunamos en un barito super cucky donde nos dan un bikini enorme! A punto de reventar, subimos unas calles hasta llegar a la catedral Sé para que nos sellen la credencial y lo tengamos todo para empezar.

Las bicis las mandamos hace 3 dias con Seur. Lo malo es que la central de Seur en Lisboa está a 15 km, asi que cogemos tren y caminamos un poco. Nos entregan las bicis, las montamos y ya estamos listas para empezar.

Los primeros 15 km transcurren per una carretera con poco arcén y por donde transcurren bastantes camiones. Luego la cosa mejora, encontrando un estupendo carril bici y entrando y saliendo por pequeñoa pueblitos. Combinamos camino y asfalto y eso nos va genial para poder rodar.

Como anegdotas, hemos tenido que pasar dos puentes por encima de las vias del tren y en una de ellas, habia un hombre atrapado en el ascensor! Hemos tenido que ir a pedir ayuda.
Luego nos han perseguido 5 perros, ladrando y corriendo como locos, pero lo hemos superado.

Nuestra etapa acabava a los 45 km (porque saliamos bastante tarde de las bicis, a eso de las 12.30) y como hemos tenido que ir en tren hasta donde las bicis, ya nos habiamos ahorrado 15 km. Asi que hemos decidido hacer 33 km más y asi poder dormir en Santarem!

Nos ha llovido un poco, pero la verdad que no nos ha molestado casi nada. La temperatura es perfecta, menos cuando estás mucho tiempo parado… (bueno, eso es normal, no?)

Y esto es todo por hoy! Ahora a cenar, dormir y descansar!

Etapa 2. Santarem- Tomar 70 km

Empezamos la mañana con un desayuno buffet del que salimos rodando. Montamos alforjas y empezamos.

La salida no estaba muy clara, así que pedaleamos por una cuesta que resulta ser en contra dirección. Así que media vuelta hasta encontrar el camino. Hemos hecho unos 5 km de regalo.

Seguimos las flechas por unos caminos rodeados de viñeros y sin perder el color amarillo avanzamos a pesar del fuerte viento y el barro que obstaculiza nuestro buen pedalear.

Vamos encontrando peregrinos. No pensábamos encontrar tantos. Muchos son ingleses o asiáticos. En un momento dado, encontramos una chaqueta en el suelo, la recogemos y escasos minutos más tarde, encontramos al dueño. Un joven de Lituania, quien ha hecho el camino en varias ocasiones, nos cuenta que hace etapas de 50-55 km! Rapidamente volvemos al pedaleo, si este hombre hace tantos km como dice, nos atrapa por la noche!

El sol sale de vez en cuando y el viento mueve a toda velocidad unas nuves oscuras que echan agua por minutos. Lo más molesto, el viento. Vamos a una media de 12 km por hora, ir por camino tampoco ayuda pero estamos haciendo mucha fuerza con las piernas para ir a esta velocidad. Esto nos demoraliza un poco.

En un momento de lluvia, paramos a por el chubasquero, el viento tumba mi bicicleta. Seguimos avanzando hasta que, 1 km más tarde, me doy cuenta que el cuentakilometros no está, debe haber caido con la bici. Retrocedemos con la esperanza de encontrarlo, y mucha suerte la nuestra al verlo junto a unos hierbajos.

Seguimos pedaleando, el viento es cada vez mas pesado pero, por suerte, el suelo está asfaltado. Nos quedan 20 km hasta llegar a Tomar, final de etapa, pero nos damos cuenta que, por carretera, hay escasos 14 km. No lo pensamos ni un minuto, carretera y manta. El viento sigue soplando pero por carretera se hace más llevadero que por caminos enbarrados por la llúvia.

Llegamos a Tomar a las 15:00 y vamos en busca de la central de Bombeiros. Mala suerte, no aceptan peregrinos… así que buscamos un albergue/hostal de peregrinos donde nos damos una reconfortante ducha y salimos en busca de aprovisionamiento.

Pronto cenamos, un arroz al curri que hemos preparado nosotras mismas en la cocina comunitaria y ahora toca dormir y descansar (una hora menos porque hay cambio horario)… Esperemos que mañana no sople tanto el viento y podamos avanzar mejor!.

Etapa 3.- Santarem- Coimbra 86 km

Empieza un nuevo día y parece que la mañana es soleada. Desayunamos un poco y montamos alforjas.

A los pocoa metros de empezar el camino, un coche nos para diciendo que vamos por la calzada antigua y que para las bicicletas mejor tomar otro camino… así que, el hombre, muy majo, nos guia. El va delante, conduciendo despacito porque hay unas subidas que parecen interminables. Nos esforzamos al máximo para que parezca que no nos cuesta… finalmente el hombre se para y nos enseña las flechas amarillas. Ahora sí que vamos por el buen camino.

Cogemos un camino de tierra, con olivares, arenilla y piedritas… aunque lentas, avanzamos. Alguna cuesta se nos atraganta y tenemos que empujar (bien, sólo una).
El camino va subiendo y bajando, y alterna camino de tierra y asfalto, pero se va bastante bien.

A las 11:30, pasados unos 30 km, paramos a picar algo. Nos desentemplamos en este paron, aparte empieza a soplar el viente y el frio nos cala a todo el cuerpo. Así que nos abrigamos y seguimos pedaleando, viento en contra y cuesta arriba.

La cosa no mejora, los primeros 30 km los hemos llevado bastante bien, ibamos frescas y las cuestas nos las tomábamos a risa… ahora, vemos que todo el tiempo subimos, a cual subida peor… y si aparece alguna bajada, nos toca pedalear por el viento… por momentos me desmoralizo… odio las subidas… y estos 50 km de hoy se estan haciendo muy duros.

Volvemos a parar, comemos algo y cogemos una carretera alternativa pues la guia que llevamos nos dice que para bicicletas mucho mejor. Seguimos avanzando a buen ritmo, ahora siguen aviendo subidas pero son más llevaderas. El viento molesta pero creo que el tentempié que nos hemos tomado ha ayudado a coger fuerzas. Seguimos por esa carretera hasta pasado Cernache, donde nos damos cuenta que, en algun punto, nos hemos equivocado. Ya van mas de 70 km y nuestras piernas, cuerpo y mente lo notan. Otro paron y seguimos. Como nos hemos equivocado y no queremos recular, avanzamos por una carretera donde hay bastante trafico, las bajadas brillan por su ausencia y las subidas empiezan a ser nuestras enemigas.

Finalmente, divisamos Coimbra a los lejos, pedaleamos hasta llegar al puente y buscar alojamiento. Por fin hemos llegado! 86 km que no nos han dejado indiferentes.

Ducha rapida y a pasear para ver esta preciosa ciudad adoquinada y LLENA de SUBIDAS.

Hoy nos meremos una buena cena, así que vamos a por una pizza, el pescado lo dejamos para Oporto!.

Mañana la etapa cuenta con menos km, esperemos que el viento no sople y sea una etapa más llevaderas.

Etapa 4.-  Coimbra- Alvergaria a Nova 72 km

Cuarto día de ruta.
Nos despertamos con niebla tras las ventanas, así que decidimos quedarnos un ratito más en la cama…

Son las 8.25 cuando empezamos a pedalear. Coimbra se despierta con el cielo despejado y a 4 grados de temperatura. En bicicleta no notamos el frio, las subidas y el constante pedaleo hacen que tengamos una buena temperatura corporal.

A los 9 km paramos en una pequeña tienda/bar donde desayunamos y recargamos pilas.
El camino parece que va a ser bastante llevadero. Mayormente transcurre en pistas asfaltadas, cosa que es de agradecer para los bicigrinos. Las subidas están presentes, pero nada tiene que ver con la etapa de ayer.

Hace muy buen día y eso nos pone contentas. Paramos de vez en cuando ha hacer algun que otro tentempié, miramos la guia, hacemos fotos…

Por el camino, y en una subida, se nos ha parado un coche con un señor muy amable que, por ser peregrinas, nos ha dado a cada una, una bolsita con una botella de agua y dos manzanas! Que buena gente hay por el mundo!

Finalmente, a los 65 km, llegamos a Alvergaria de Vilha, donde teniamos pensado quedarnos a dormir. Pero después de dar mil vueltas, encontrar el albergue cerrado, preguntar en los bomberos y que estos nos indiquen que vayamos a la iglesia, para luego ir al ayuntamiento… enfin, que nada, hemos puestos los pies en los pedales y con vista al siguiente pueblo con albergue. Así es como nos han salido 72 km.

El albergue, una pasada. Es una casa particular convertida en albergue. Con cocina, lavadoras, manguera para lavar bicis… todo un lujo. La lástima es que no hay un supermercado cercano (aunque los dueños del albergue se vuelcan a llevarte). Hemos decidido intentar hacer autostop, para los más de 3,5 km que habia, pero nadie nos ha cogido así que hemos llegado tras un largo y tendido paseo a pié. La vuelta, una amable señora nos ha dejado en frente del albergue, donde hemos podido cenar y ahora, a dormir.

Mañana llegamos a Oporto, donde el miércoles nos encontraremos con Sira para poder finalizar el camino juntas. Tememos al tiempo, la predicción es muy mala…

Etapa 5.- Alvergaria a Nova-Oporto 60 km

Nos levantamos sin prisa, hoy va a ser una mañana corta de pedaleo. He pasado un frio terrible por la noche (todo por no levantarme a por el saco), así que he dormido bastante mal.

Ayer pusimos una lavadora, así que hoy tenemos ropa seca y limpia. No os podeis imaginar la ilusión que nos hace.

El albergue, que es una casa particular convertida en albergue, nos ofrece el desayuno. Como todos los dias, comemos más de lo que debemos, pero esque está tan bueno todo…

Empezamos la ruta siguiendo las flechas amarillas, vamos adelantando peregrinos que han salido mucho más temprano que nosotras. El camino es bonito pero, como ya llevamos diciendo unos dias, sube y baja constantemente. Es un rompepiernas en toda regla!
A los 30 km, ya un poco malhumoradas por el cansancio, para a descansar y comernos una manzana (de esas que nos dió ese amable señor ayer).

Seguimos pedaleando, pasando por pequeños pueblos que nos indican la cercania a Oporto. A escasos 17 km de la gran ciudad, el camino se convierte en adoquines y va a ser así hasta el final de etapa. A parte, atravesamos cuesta arriba una calzada romana original y os puedo asegurar que no ha sido nada fácil subirlo!

Finalmente, entramos Oporto. Sus calles abarrotadas de gente, el caos con el trafico y sus subidas.

Encontramos alojamiento, nos duchamos y tenemos la tarde para callejear, tomar algo y comer un buen plato de bacalau. Nos lo hemos ganado, no?

Etapa 6.- Oporto- Ponte Lima 82 km

Son las 7 de la mañana cuando suena el despertador. Con pereza nos vestimos y recogemos las cosas. Bajamos alforjas, las montamos y desayunamos como gordas.

Al sacar las bicis, empieza a lloviznar y, encima, me doy cuenta de que mi rueda delante está pinchada. Manos a la obra. Sacamos la rueda, cambiamos cámara, un poco de aire y como nueva.

Hoy llega Sira y su bicicleta está en la central de Seur, a unos 13 km del centro de Oporto, así que vamos en su búsqueda. Aparte, el camino pasa justo por delante.

Son las 9.40 cuando llegamos, a ella le acaban de entregar la caja, así que entre las tres, acabamos de ajustarla y nos ponemos de camino.

Ya no llueve, el dia está muy tapado pero se está bien. Seguimos las flechas y vamos saludando alegremente a peregrinos que encontramos por el camino. Todos van a pié (por qué será?).
Pasamos por caminos de barrizal, adoquines por doquier y pistas aslfatadas.

En Barcelos, cuando ya llevamos 55 km, nos empieza a llover así que decidimos parar a descansar y comer algo. Fuet y pan en mano y pa dentro!. La lluvia parece que no cesa, así que decidimos optar por carretera para no quedarnos atrapadas en el barro.

La lluvia nos empapa, subidas largas y algunas bajadas merecidas pero el frio de la lluvia no nos deja disfrutarlas.

Paramos en un taller a que arreglen un tornillo del portaequipages de Sira (un chico majisimo que no nos ha cobrado nada) y en menos de 10 km llegamos a Ponte de Lima, donde buscamos el Albergur público (5euros),nos instalamos y duchamos.

Sale un poco el sol, aprovechamos para ver el pueblo e ir a comprar la cena. Una ensalada y arroz!

Mañana el dia pinta peor que hoy. Veremos como lo superamos

Etapa 7.- Ponte Lima- Redondela 72 km

Después de una noche agetreada (las campanas a todas horas, despertadores varios y una cama con un cojin resbaladizos) empieza nuestra séptima etapa.

Todavia no llueve, así que nos apresuramos a salir cuanto antes. 8 de la mañana y ya estamos listas para rodar. Seguimos el camino sin mayor dificultad, sorteando charcos, barro y piedras.

A los 8 km, paramos a desayunar en una tienda-bar. Ahí empieza a llover así que enlazamos con una carreterita secundária. No obstante, ya teniamos pensado cogerla pues tocaba subir el puerto de la Bruja y por camino era impracticable.

La subida en bici no es tan dura como parece. Lo único malo es llevar el chubasquero empapado por fuera de agua y por dentro de sudor.

Arriba, me abrigo, ahora toca bajar y la llúvia a cesado. Lo que vendrá ahora son constante sube y baja, pero muy llevaderos.

Llegamos a Valença, último pueblo portugués (y precioso) y cruzamos un puente que nos entra al primer pueblo Gallego Tuí.

Hemos perdido una hora (adelantamos el reloj) y paramos en un bar a comer unas patatas. Cuando estamos listas para volver a empezar, cae un chaparrón, así que esperamos a ver si amaina. Y… así es. Por momentos parece que sale el sol.

Queremos avanzar porqué mañana la previsión es peor. Llegamos a Oporriño sin problema, compramos algo de cena para la noche y nos enfretamos a los últimos 16 km.

Sabemos que viene subida así que lo tomamos con filosofia. A los 6 km empieza una fuerte pendiente y la lluvia empieza de nuevo. Ahora parece que ya no va a parar. En un momento de crisis, empieza a llover súper fuerte, nos cae granizo y avanzamos como podemos en medio de la nada.

Por suerte, ahora toca todo bajada hasta Redondela, la lluvia ha aflojado casi del todo y solo el frio nos conjela los dedos de las manos.

Llegamos al Albergue más felices que nunca!.

Ducha hirviendo, limpiar ropa, picar algo, cenar y dormir… que pasará mañana?

Etapa 8.- Redondela- Padrón 60 km

Hemos superado la octava etapa.
Si acabaramos en Santiago hoy, deberíamos añadirle 23 km más, pero nos apetece desviarnos e ir hacia Muxia y Finesterre.

Son las 7.30 cuando nos levantamos, primera mañana en Galicia y ibamos convencidas que seria de día…pero no, aún es de noche (en Portugal si que era de dia!). Vemos que no llueve, así que nos apresuramos a montar alforjas y salir.

Empieza la mañana por cuestas y caminos empedrados. A los 6 km, empieza a llover así que aprovechamos para desayunar. La lluvia es fuerte pero parece que al rato para, así que volvemos a salir.

Sabemos que hoy el dia será duro, primero por un constante rompepiernas y segundo por el mal tiempo, pero ahi vamos, a la aventura. Sólo salir, nos metemos por un caminito empedrado, por donde pasa un riachulo .. así que toca bajarse de la bici y empujar. Encima nos empieza a llover de nuevo.

Una vez arriba (después de una larga y densa subida) empieza la bajada hasta Pontevedra. Sello en la catedral y seguimos.

Sólo cruzar el puente y cae un chaparrón, acompañado de vienro increible. Nos resguardamos en la gasolinera. Estos parones nos hacen coger frio.

Vuelta al ruedo por un bonito caminito, pero de pronto vemos in flaix. Nos habran hecho una foto? No! Es un rayo y a los segundos suena el trueno. Empieza a llover a mares y nos cae mucho granizo. Que daño en las manos y en las piernas! Paramos bajo un puente para que cese.

El camino, por hoy, será así. Subidas, lluvia, granizo y frio.
En Caldas de Rei, paramos. Nos cambiamos los calcetines y nos ponemos una bolsa entre los zapatos y los calcetines para que no se nos mojen más y evitar ir empapadas todo el trajecto.

Ya solo quedan 16 km hasta Padron, que haremos por carretera. La lluvia nos acompaña, juntoa sus subidas y bajadas.

Una vez en Padrón, por fin, nos duchamos y entramos en calor. Luego un pequeño paseo y a tomar algo hasta la hora de la cena!

Etapa 9.- Padrón- Muxia 78 km

Aunque haya sido toda una etapa por carretera, y aunque no nos haya llovido, no podemos decir que la novena etapa nos ha dejado indiferentes y menos viendo su perfil.

Hoy decidimos desayunar en el albergue para iniciar el dia con fuerza. Sabemos que nos esperan muchas subidas y si hasta ahora habíamos tenido rompepiernas, lo que hemos hecho hoy es igual o peor.

Empezamos la mañana por una pista asfaltada, rodeada de campos, casitas y con unas vistas inigualables. El dia se ha levantado más o menos despejado pero con mucho frio. El camino empieza a subir considerablemente hasta llegar a Brión, pueblo por donde pasa la vuelta a España en bicicleta. Como somos más chulas que nadie, decidimos que este puerto también lo queriamos hacer como ellos, pero con bici de montaña y alforjas. Y ahí estámos, pedaleando.

Luego nos metenemos en una carretera que nos llevará directas a Muxia. Al principio (hasta los 6km) que nos quedan hasta Negreria, la carretera tiene más tráfico, luego pasan muy pocos coches y, aunque hay subidas y algunas bajadas, vamos bastantre tranquilas.

En el km 32 vuelvo a pinchar (4 dias después) la rueda delantera. Paramos a cambiarla y en 5 km enconcontramos un super donde parar para comprar algo y tomar algo calentito en un bar.

Nos quedan aun 40 km hasta Muxia y aunque pensábamos que ahora empezaria a bajar, nos equivocamos. La carretera sigue subiendo y en nombradas ocasiones llevamos el viento en contra. No obstante, sabemos que hoy acaba la etapa y tenemos ganas de ver el mar.

La verdad es que tanta subida nos desespera y en algun momento parece que nos derrumbamos, pero al poco volvemos al ataque.

Una bajada, mil subidas y un poco más de bajada y por fin llegamos a Muxia. Final de etapa, final del camino.

Os dejamos el vídeo que hicimos de esta tremenda aventura!